Mapa de migración para los Ritos de Pasaje: Un material para usarse en la Terapia de Prácticas Narrativas

| Por Ángeles Díaz Rubín (Cuqui Toledo)|

¿Cómo es que en su último libro, Maps (2007) Michael White no dejó un mapa específico que se llame Ritos de Pasaje? Esta pregunta me llevó a entender con mayor claridad que los mapas no son el territorio, que sólo indican un camino a seguir para llegar al destino que se desea.

Tomando en cuenta lo que dice la antropología: que los ritos, rituales y ceremonias de identidad son formas para manejar los cambios creados por todas las comunidades y las sociedades a través de la historia de la humanidad, me pregunté: ¿Cómo es que en su último libro, Maps (2007) Michael White no dejó un mapa específico que se llame Ritos de Pasaje? Esta pregunta me llevó a entender con mayor claridad que los mapas no son el territorio, que sólo indican un camino a seguir para llegar al destino que se desea, y de inmediato vino el recuerdo de Michael White diciendo:

– “¿Qué van a hacer para hacer lo que les he enseñado sin hacer lo que yo hago?”

En la vida continuamente estamos cambiando sin darnos cuenta (pasado, presente y futuro) y hay cambios más notorios que se resuelven entre los miembros del grupo de pertenencia sin necesidad de ayuda, por ejemplo cuando dejamos de vivir en la casa de nuestra familia de origen, al casarnos, o cuando vamos a estudiar al extranjero. Sin embargo, hay otros cambios más difíciles que requieren ayuda externa profesional.

Cuando David Epston empezó a ejercer la terapia familiar se dio cuenta de esto y recordó lo que sabía de los rituales de paso de su tiempo en la sociología y la investigación antropológica. Probablemente tanto a David Epston como Michael White les cautivó relacionar la antropología con su práctica terapéutica, con su gran capacidad de observación desde la curiosidad, se percataron de la dificultad que hay para llegar a un cambio real en el continúo fluir de la vida, y en sus conversaciones sobre la capacidad de reflexión que nos hace humanos y que nos permite crear formas de mitigar la ansiedad, fue cuando le dieron peso a los Ritos de Pasaje. Así, Michael White nombró esre proceso “migración de identidad” y pensó en la metáfora de mapas para acompañar ese viaje de migración.

Las Practicas Narrativas tienen muchas formas de expresarse, enseñarse, practicarse y aprenderse, no solamente con la palabra hablada o escrita, que es la más usada, también se expresan por medio del dibujo, la música, canciones, teatro, bailes, danzas tradicionales, por la observación y expresión de la naturaleza, del cielo, del tiempo, etc.

Y un trabajo terapéutico, ¿no viene a ser también una forma de “Rito de Pasaje”? Pues es una migración del “territorio conocido”, o “territorio del problema” hacia un “territorio por conocer”, el “territorio de identidad preferida” que podemos desear e  imaginar, pero que no sabemos con certeza cómo será en la realidad. Además este cambio de territorio necesita de un trabajo, un recorrido intermedio que en el Mapa de Migración corresponde a la “etapa liminal”.

 

Mapa de Migración desde los Rituales de Paso en la Narrativa

Maggie Carey en uno de sus primeros talleres en México, nos enseñó este mapa al que llamaba: “Mapa de Migración”. Cuando explicaba en clase lo que sucedía cuando se optaba por relacionarse con la vida en la forma que ofrecen las Prácticas Narrativas, dibujaba en el pizarrón un camino con montañas, valles, desiertos, bosques ríos, mares, peñascos, etc. Este era el camino que había que recorrer desde el lugar conocido donde se encontraba la persona, y del que quería migrar, para llegar al lugar de sus sueños, ilusiones y esperanzas: el Territorio por conocer.

Figura 1: Mapa de migración

El “Mapa de Migración” (ver Figura 1) se usa para originar cambios y contiene tres espacios o etapas, tal cual señalan los Ritos de Pasaje en la antropología. Siguiendo esta lógica, la primera etapa es el “Territorio del Problema” también nombrado “Territorio Conicido” o “Etapa de Separación”. La segunda etapa es la “Etapa Liminal”, el trayecto que la persona tendrá que recorrer para llegar a un nuevo territorio, la última etapa es la de “Reincorporación” y corresponde al “Territorio Preferido”, es decir cuando la persona ha asumido el cambio y ya maneja su vida desde su identidad robustecida.

Este mapa puede usarse también en una primera sesión para explicar a las personas que nos consultan cómo es el funcionamiento de las Prácticas Narrativas y más adelante, al ir trabajando la Re-autoría, se puede ir trazando en el espacio liminal del dibujo de este mapa los avances del trabajo.

El ejemplo y material ilustrado que presento a continuación (ver Figura 2), es otra forma para trabajar con este mapa. Como decía el coleccionista de arte Kurt Stanhagen cuando enseñaba su colección: “Una creación es la copia de algo ya inventado con anterioridad pero presentada en forma diferente” y a continuación enseñaba la hoja de una revista con una escultura contemporanea y de un cajón sacaba una pequeña escultura de barro precolombina de forma parecida”.

Figura 2: Material ilustrado

En la práctica este mapa es muy útil porque también facilita la postura del terapeuta: “descentrado pero influyente”, ya que la persona que consulta es quien irá escogiendo las figuras que se encuentran al lado del tablero para colocarlas en el lugar que cree conveniente. La intervención del terapeuta es sólo hacer buenas preguntas que le aclaren a la persona la utilidad que tienen para su vida los personajes, o los objetos que quiere que le acompañen y el lugar donde los quiere colocar. Es importante siempre preguntar el PARA QUÉ lo selecciona y lo coloca en ese lugar. Durante el trayecto de este viaje terapéutico se pueden hacer preguntas siguiendo los otros mapas que Michael White ha propuesto para migrar la identidad de la persona y engrosar sus historias preferidas. Por ejemplo, entre otras muchas, según el camino que vaya tomando la conversación, se pueden hacer preguntas sobre la relación de un ser querido difunto o preguntas siguiendo el modelo de testigos externos.

Figura 3: Tablero y fichas

Instrucciones para el manejo del tablero y del material usado

El tablero estará sobre la mesa (ver Figura 3), y todas las figuras a la vista al lado del tablero donde no hay faro, es el territorio donde se colocará el embarcadero y el barco. Entre terapeuta y consultante van colocando el muelle y el barco que simboliza la vida de la persona. El/a consultante será quien maneje el timón y decida el trayecto.

Se colocan los elementos que van en el cielo, siempre conversando lo que representan. Por ejemplo, aprovechar las estrellas para comentar que así como en el cielo hay multitud de estrellas, y sólo se escogen unas cuantas para formar las constelaciones, igual hacemos en la vida, nos olvidamos que somos multi-historiados y escogemos unas cuantas situaciones para demostrar la identidad. Y quizá, más adelante, en algún momento apropiado, se pueda trabajar con esta metáfora para re-historiar y engrosar la identidad de la persona, tomando en cuenta otros eventos que las estrellas simbolicen para formar otras “constelaciones”, otras historias que habían estado olvidadas.

Es importante también hablar de la utilidad del faro que ilumina y guía el camino que hay que seguir para llegar al al destino deseado; por ejemplo es muy frecuente que una mamá diga que el faro con su luz le ayuda para saber lo que quiere para sus hijos, lo que le impulsa a vivir, que el faro lumina su papel de educadora.

Se colocan también otros elementos como: la isla, un lugar para descansar en la larga travesía; el arrecife, esa situación inesperada que nos hace darle la vuelta y retrasa la llegada; los animales peligrosos que representan las situaciones no deseadas que encontraremos en el camino.

Una vez armado el tablero y explicado lo que las figuras representan  se empezará a conversar sobre el territorio al que la persona quiere llegar, cómo se lo imagina, se deconstruyen las ideas, y se va utilizando lenguaje externalizante, pidiendo que lo detalle en forma realista y concreta. Es decir, si por ejemplo dice: “un lugar para ser feliz” tendremos que preguntarle que es para ella “ser feliz” Y si lo que contesta es “un lugar donde se viva en paz” se le puede preguntar “¿y cómo sería tu vida, que estarías haciendo para que te sintieras feliz, viviendo en paz?”. Es importante usar las mismas palabras que la persona usa, preguntar si el terapeuta está entendiendo bien, no aceptar palabras abstractas sino siempre detallar concretamente, no importando el tiempo que tome.

El/la consultante por sí solo/a irá escogiendo las figuras que representen a las personas (abuelos, padres, hijos, familiares, amigos, etc.) y los colocará en donde le parezca conveniente, siempre conversando sobre la utilidad que tiene esa figura y el papel del lugar donde la coloca para su vida de hoy en adelante. También las figuras pueden representar retratos, cualidades y recuerdos de la persona.

Al mismo tiempo se va colocando lo que quiere llevar en el barco durante  la travesía o lo que encontrará en el lugar deseado, siempre hablando del PARA QUÉ y también, a veces, del por qué se los quiere llevar. Por ejemplo, para los recuerdos que se quieren conservar, puede ser útil trabajar con la figura del baúl de los tesoros. También es importante hablar de los objetos y personas que se van a quedar y despedirse de ellas, las personas que no quiere que vayan con ella en el barco, pero que podrían visitarla una vez instalada en el territorio por conocer. Esas personas podrían colocarse en el embarcadero o cerca para que esperen su propio barco. Para los objetos que elija, como por ejemplo la bicicleta, habrá que habblar de su significado metafórico y preguntar ¿Por qué quiere llevarla? ¿le será útil en el nuevo territorio? ¿cabe en el barco? ¿no será un estorbo? ¿no sería mejor comprarse una bicicleta nueva a su llegada? Etc.

Estas conversaciones podrían parecer inútiles y pérdida de tiempo, pero sirven para que la persona vaya practicando el hábito de preguntarse PARA QUÉ serán útiles distintas ideas, redes, etc., antes de tomar decisiones en la vida real. La idea es invitarlos a pensar antes de actuar impulsivamente desde sus sentimientos y estados de ánimo, para no quedarse buscando culpas y culpables sino para tomar el timón de su  vida y no dejar que el problema les siga manejando la vida.

La travesía, que es el espacio liminal, es al que se le dedica más tiempo, empezando por el equipamiento del barco. ¿Habrá otras personas que desea llevar o invitar a su barco? ¿por qué y para qué? Recuerdo una señora que me dijo: “Tengo que llevar al papá de mis hijos porque lo necesitan, pero si empieza a ser molesto lo tiro al agua con el salvavidas hasta que se calme”.

Los animales marinos peligrosos son muy importantes, pueden simbolizar situaciones como por ejemplo el trámite de la patria potestad de los hijos y la pensión alimenticia en un divorcio. También pueden representar a personas, recuerdo una chica joven recién casada que escogió al pulpo para simbolizar a su suegra que quería subir sus tentáculos al barco para quitarle el timón de manejo. Y así se va conversando de los objetos que necesita llevar y su utilidad, libros, bitácora de viaje, el ancla para asegurar el barco en la isla de descanso o para conservarlo en el muelle del destino para futuros viajes ,etc.

Es importante destacar que la mayoría de las veces, decidir dejar el terreno conocido es difícil y toma tiempo. Recuerdo que cuando estrené este material, era en una primera sesión, la persona solamente tomó sin darse mucha cuenta el salvavidas y lo tuvo en la mano mientras que conversamos del problema en el que se encontraba. El material tuvo que esperar a que primero usáramos el Mapa de Toma de Posición 1. Todavía no era momento para pensar en travesías.

Otra cosa en la que hay que estar atentas, es que las personas casi siempre piensan que al dejar el territorio del problema, por ejemplo en un divorcio, creen que ya se acabó el problema, ya se ya van a sentir por fin felices. Al no ser así, es fácil que quieran abandonar la travesía y regresar al territorio conocido por malo que sea. Por eso hay que explicar el uso del mapa y cómo en la etapa liminal o sea en la travesía, habrá tormentas, oleajes y posibles climas malos que habrá que soportar.

Recordar que este viaje es un “Rito de Pasaje” por lo que hay que darle tiempo y dedicación a los preparativos, como se hace en otros ritos sociales a los que estamos acostumbrados.

En la foto de los objetos, en la esquina iferior izquierda hay un zapato. Quiza estaran preguntándose para qué un zapato… Es para dárselo a la persona al final de la sesión para que lo abrace, “ Sí,  abrazar un zapato con-suela”. (clásico chiste de Cuqui porque me gusta que la gente al final de la sesión se ría).

Les deseo Buen Viaje y ARRIBA Y ADELANTE!!!

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